Albert Salmerón: «Los datos que presentamos son más que positivos»

En 2010, con motivo del décimo aniversario de la Asociación de Promotores Musicales (APM), publicamos el primer ‘Anuario de la música en vivo’, gracias a la decisión de la junta directiva que entonces lideraba APM y a la presidencia que creyó firmemente en este proyecto. Durante todos estos años, también gracias al gran trabajo, esfuerzo y rigor de Pauta, la agencia de comunicación de APM encargada de su elaboración, el anuario se ha consolidado como la publicación de referencia del sector.

No ha sido fácil llegar hasta aquí, pero ha valido la pena. No es sencillo hacer sostenible la edición de un formato como este, pero hemos encontrado las vías para conseguirlo. El anuario es una auténtica radiografía de la situación de esta industria y si miramos atrás, a través de reportajes, datos y análisis, podemos ver cómo ha evolucionado la música en directo. Por eso ahora este es un documento imprescindible para entender la música en vivo y, por qué no, incluso la cultura de este país.

En este décimo anuario, los datos que presentamos son más que positivos. La facturación de la industria del directo respecto al pasado año ha crecido un 24 por ciento, alcanzando la cifra récord de más de 333 millones de euros. Podríamos decir, contradiciendo la canción del malogrado Germán Coppini, que por fin empezamos a vivir buenos tiempos para la lírica. Un ciclo económico general más dinámico y algunas novedades específicas, como la bajada del IVA cultural al 10 por ciento han propiciado este cambio de tendencia que desde APM anhelábamos y perseguíamos.

Si nos fijamos en las demandas reflejadas en anteriores anuarios, veremos que en los últimos años hemos ido consiguiendo pequeñas mejoras que propician grandes cambios: desde el acceso de los menores a conciertos a la reducción, aunque aún hoy insuficiente e injusta comparada con nuestro entorno, del canon de derechos de autor. Pero los retos siguen estando ahí, y para ello desde APM realizamos una tarea didáctica ante la administración pública para que entiendan qué es esto de la música en directo, pero también de presión para alcanzar cada día nuevos avances.

Para conseguirlos necesitamos trabajar de forma transversal. Por eso estamos en la Plataforma Estatal por la Música, junto a asociaciones de músicos y entidades que representan a salas, festivales y agentes, con el apoyo de organismos públicos, para que la legislación en materia de contratación de artistas nos proteja a todos y refleje la realidad y las casuísticas tan diversas y complejas con las que trabajamos. También estamos en la Mesa de la Música, que acoge a todas las industrias del sector, discográfica, editorial y autores, y por supuesto el directo, con el objetivo de analizar dónde estamos y realizar un plan estratégico a medio y largo plazo que nos ayude a trabajar con perspectiva y nos fortalezca.

Necesitamos que el IVA del 10 por ciento se aplique también a la contratación de los artistas y a los servicios relacionados con un concierto para evitar distorsiones en el mercado, tal como se está haciendo en otros países de la Unión Europea. El Real Decreto del 28 de diciembre, que contemplaba el IVA del 10 por ciento en la facturación de artistas como personas físicas solo en caso de hacerlo directamente con el organizador, es totalmente insuficiente y un parche que no soluciona el problema. Con SGAE tenemos que acordar una nueva tarifa justa y proporcional. Y la reventa sigue afectándonos a todos, desde al público a los promotores, pasando por el artista. Para solucionarlo necesitamos lo antes posible una ley reguladora que contemple sanciones. El camino está marcado y vamos a recorrerlo. Y, en cualquier caso, para nada nos vamos a ir con la música a otra parte.


Este texto fue publicado originalmente en el especial décimo Anuario de la música en vivo