La música en vivo podrá retomar la actividad con aforos reducidos en la fase 1

Los “actos culturales” de pequeño formato se podrán celebrar en la fase 1 del proceso de desescalada, es decir en las mejores perspectivas en dos semanas, lo que supone que a mediados de mayo la música en vivo podría estar de vuelta. Aunque con muchas restricciones.

Según ha publicado el Gobierno en el “Plan para la transición hacia una nueva normalidad”, en esta fase se podrán programar los eventos culturales “de menos de 30 personas en espacios cerrados con un 1/3 del aforo”. Al aire libre se permitirán eventos de menos de 200 personas “siempre y cuando sea sentado y manteniendo la distancia necesaria”.

Ya en la fase 2, “auditorios y espacios similares con butaca pre-asignada” podrán abrir con una limitación de un 1/3 del aforo. En esta fase los actos culturales crecen de aforo respecto a la fase anterior, aunque se mantienen las limitaciones a un tercio: los eventos de menos de 50 personas en espacios cerrados y de menos de 400 personas al aire libre “siempre y cuando sea sentado y manteniendo la distancia necesaria”.

En la fase avanzada o fase 3, las actividades con un 1/3 de aforo de la fase anterior podrán pasar a 1/2. Las “salas musicales” podrán abrir sus puertas con una limitación de 1/3 del aofor, mientras que los actos culturales de menos de 80 personas en espacios cerrados pueden acoger 1/3 de su aforo. Además, en el aire libre augmentan su capacidad y se podrán programar actos culturales de menos de 800 personas “siempre y cuando sea sentado y manteniendo la distancia necesaria”.

El proceso de desescalada cuenta con cuatro fases cada una de las cuales tendrá una duración de dos semanas. El cambio de fase lo determinarán las autoridades sanitarias a través de unos criterios marcados por el Gobierno.

La fase 0, de preparación y que comienza el 4 de mayo, incluye la apertura de los restaurantes de comida para llevar, y siempre con cita previa, según Sánchez. En la fase 1 se permitirá funcionar a las terrazas de los restaurantes, con un 30 por ciento de su ocupación. En la fase 2, los locales interiores, también a un tercio de su capacidad. Es en esta fase que reabrirán los auditorios junto a los cines y teatros con aforo reducido.

También se permitirán las visitas a monumentos y salas de exposiciones, con limitación de entradas. En la fase 3 se prevé la apertura de todas las actividades, algunas de ellas con limitaciones de asistencia, y todas manteniendo las medidas de seguridad y distancia oportunas. En la última fase, llamada “nueva normalidad” se flexibilizará la movilidad general y se producirá la reapertura de las playas.