Bunbury: «Las normativas para conciertos (durante la pandemia) son poco realistas y emocionantes»

Enrique Bunbury ha alumbrado nuevo disco en 2020, Posible, ya en las tiendas tras el alivio del confinamiento en España, donde su gira sin embargo se retrasará hasta al menos 2021, cuando la llamada nueva normalidad dé paso en los conciertos a la normalidad de siempre. Así lo cuenta el zaragozano en esta charla con Apmusicales.

PREGUNTA: ¿Cómo estás pasando el confinamiento?
BUNBURY: Estoy razonablemente bien. Mi vida cotidiana se parecía mucho a la que llevo estos días. No salgo habitualmente de casa. Casi todo lo que me gusta lo tengo aquí. Escribo, toco la guitarra o el piano, leo, veo alguna película, pinto… Afortunadamente en Los Angeles no prohibieron salir de casa en ningún momento, así que salimos a dar alguna vuelta por el vecindario. Pero sí que echo de menos la posibilidad de planificar tu tiempo. A corto, medio o largo plazo. Saber cuándo o cómo vas a poder irte de vacaciones. Y cuando ver tranquilamente a tus amigos y familiares y darte abrazos con normalidad.

PREGUNTA: A finales de 2018, cuando se publicó Canciones 1987-2017, anticipabas un futuro disco de temas inéditos. Llega finalmente a mediados de 2020. ¿Simplemente por distanciar los lanzamientos o se ha atrancado en algún punto del proceso de su elaboración?
BUNBURY: La gira de Expectativas se alargó hasta marzo de 2019. En junio ya entré a grabar este álbum y terminé el 1 de noviembre. Con los tiempos de fabricación y el tema de los adelantos… A mí se me ha hecho muy largo. Pero me ha dado tiempo a seguir escribiendo y preparar más material para lanzamientos futuros.

PREGUNTA: El coronavirus retrasó además la fecha original de salida. ¿Ha sufrido la tentación de retocarlo en estas inesperadas semanas de
contemplación/maduración o ha decidido apartarse completamente del álbum?

BUNBURY: No, qué va. Creo que no lo he vuelto a escuchar desde que terminé las mezclas en noviembre. Soy muy consciente de que un disco es un fotograma temporal de tu momento artístico. No tiene sentido volver a revisar una vez que ha terminado el proceso de creación.

«Me ha dado tiempo a seguir escribiendo y preparar más material para lanzamientos futuros»

PREGUNTA: Si solo tuviéramos en cuenta el título de los dos últimos discos, de Expectativas a Posible, podría dar la sensación de que Enrique Bunbury se está moviendo en un territorio de irrealidades. ¿Es
así?

BUNBURY: Son dos discos que parten de premisas muy distintas. Expectativas era un disco que miraba hacia afuera, hacia lo social. En cambio Posible es un disco introspectivo. Habla de las posibles versiones de uno mismo que dejamos pasar y las infinitas versiones de uno mismo que nos esperan en el futuro. Cada día tomamos múltiples decisiones que pueden cambiar nuestro futuro en direcciones inesperadas.

PREGUNTA: ¿Hay alguna decisión del pasado a la que dé más vueltas?
BUNBURY: Siempre pienso que debería de haber dedicado menos tiempo a estudiar, me quitó mucho tiempo de lo esencial e importante de mi vida y de mi carrera.

PREGUNTA: Ha transmitido su seguridad sobre el resultado final de Posible. ¿Lo consideras incluso superior a Expectativas?
BUNBURY: Cuando has grabado tantos discos, no piensas en esos términos. De hecho, no tiene mucho sentido hacer ni comparativas, ni competiciones entre tu propia obra, ni siquiera con respecto a la obra ajena. Nunca pienso en cuál es mi disco favorito de los Beatles o de Bowie o de Dylan. Ni cuál es mi película favorita de Bergman o de Woody Allen. No es necesario.

«Debería de haber dedicado menos tiempo a estudiar, me quitó mucho tiempo de lo esencial»

PREGUNTA: ¿Fue uno de esos discos que arrancan con una canción que moldea el espíritu de las demás?
BUNBURY: Tenía el material y la dirección muy claras desde antes de entrar a grabar. No hubo una canción que marcara la dirección a seguir. Fue un proceso de trabajo. Muy costoso, por cierto.

PREGUNTA: Las perspectivas de presentar un disco en vivo ahora mismo son aciagas, tanto en España como en América. ¿Cómo lo vives?
BUNBURY: En realidad, está claro que quién esté tomando las decisiones está hablando individualmente con cada gobernante para llamar a las cosas de la misma manera y dar los mismos pasos. Así que por ahora no habrá presentaciones en vivo. Esa es mi decisión.

PREGUNTA: ¿No te gusta la llamada «nueva normalidad» que se plantea para el directo?
BUNBURY: Las normativas que se escuchan y se intuyen me parecen poco realistas y muy poco emocionantes. La posibilidad de realizar un concierto con separación de seis pies entre cada espectador, fumigarles a la entrada, reducir los aforos a un tercio… Son decisiones que no están tomadas pensando en la viabilidad, ni en la emoción de los conciertos. Así que, hemos movido todas las fechas al 2021 y ya esperamos volver en condiciones normales.

«La compra de discos es un acto voluntario y costoso a varios niveles, que implica verdadero interés por el contenido del álbum»

PREGUNTA: Los promotores españoles se han quejado amargamente de no haber sido escuchados en sus reclamaciones al Gobierno. ¿Esperaba más sensibilidad de un gobierno de izquierdas o piensa que ahora mismo no se puede hacer más?
BUNBURY: No sé de los pormenores de la negociación. No veo noticias. Como norma desde hace años. Pero ahora con muchísima más razón. No me interesa nada la política. Me parece ruin. Creo que la información debería estar siempre contrastada y veo que, en su mayoría, los medios informan de forma tendenciosa. Así consiguen una sociedad enfrentada, y es una lástima, porque la sociedad, todos, somos víctimas de nuestros gobernantes y de las organizaciones que toman realmente las decisiones: la OMS, el FMI, el Banco Central Europeo, la Comunidad Europea,… y el Big Pharma y otras organizaciones y empresas tecnológicas que van a hacer su agosto con este virus.

PREGUNTA: También se han quejado del agravio comparativo con el mundo del cine. ¿Dentro de la cultura sientes que la música queda como segundo plato?
BUNBURY: No sé, ya te digo que no sigo los pormenores. Es un tema que seguro necesita de reflexión y de unión entre los diferentes gremios que conforman cada sector. Pero bueno, ya sueno como un sindicalista y no es mi tema, ni me dedico a ello. Yo no tengo nada en contra del cine, todo lo contrario, estoy a favor del éxito ajeno. Además es un arte que nos hace felices a mucha gente.

PREGUNTA: Promusicae anunciaba recientemente una fusión de las listas de discos más vendidos en formato físico y los más reproducidos en plataformas digitales. ¿Qué tal te sientes en este nuevo contexto, con igual peso de uno y otro lado?
BUNBURY: No sé exactamente las razones del porqué han tomado esa decisión. Lo mío es el La menor y la rima. Formo parte del contenido de esas listas, no las confecciono. Y siempre pensé que la música no son carreras de caballos. Llegar el primero no significa nada. No aporta una información con respecto al contenido emocional de una obra. Me gusta demasiado la música y el arte como para que me parezca sustancial quién es el número uno cada semana. No tengo ni idea de quién es. No miro la lista para comprarme un disco o para saber qué debo escuchar. Dicho esto, me da la impresión de que son datos distintos. La compra de discos es un acto voluntario y costoso a varios niveles, que implica verdadero interés por el contenido del álbum. En el streaming inevitablemente confluyen los intereses del oyente con los de los que confeccionan las playlists y diseñan algoritmos aleatorios que quizás no lo sean tanto.

Bunbury han confirmado cinco grandes actuaciones en España tras el verano de 2021, con inicio el 4 de septiembre en el Pueblo Español de Barcelona. Seguirá por Zaragoza el 11 de septiembre (Recinto de la Expo), y por Málaga (Auditorio Municipal, 18 de septiembre). En Valencia tocará el 25 de septiembre (Plaza de Toros) y, por último, en el multitudinario Wizink Center de Madrid el 2 de octubre.