El Arenal Sound es el ejemplo más claro de esos festivales en los que lo más importante no es la música, sino toda la experiencia vital que ofrecen. Y en este caso, además, dirigida muy específicamente a los más jóvenes. Así se desprende, al menos, de su último aftermovie publicado este jueves. Son más de ocho minutos en los que se repasan todas las claves de un festival que se ha erigido, prácticamente desde su nacimiento en 2010, como uno de los más multitudinarios del país.
Durante los dos primeros minutos y medio, prácticamente no vemos a ningún artista. Aquí los protagonistas son los asistentes: jóvenes con ganas de vivir y divertirse. Asun Beltrán, una de las redactoras de la web ‘Un festival por dentro’, escribía en 2016: «Una de las cosas que nunca me ha fallado [en un festival] ha sido el factor humano, tanto la gente con la que he asistido como los vecinos de camping. Y esta es una de las cosas que tienen más peso para mí, porque cuando pienso en un festival lo primero que me viene a la cabeza es ahí es cuando conocí a Fulanito o en ese teníamos unos vecinos majísimos de la Isla Perejil o allí conocí a una chavala súper random. Porque, ¿qué sería de los festivales sin este tipo de anécdotas?».
Pues de eso van los ocho minutos del aftermovie del Arenal Sound. Reproducen el recuerdo de un momento feliz: aquel beso, aquella euforia, aquel chico, aquel momento. También, claro, hay espacio para las marcas, y luego están los artistas: Bad Gyal, Rozalén, La Raíz. Eclecticismo a tope. En las redes, sus seguidores no hacían sino darles la razón.
https://twitter.com/laura9715/status/1052882588069703680
https://twitter.com/sb_ainhoa/status/1052887930845454336
