Foto de Sveta Bar

El cierre de Sveta Bar en Tallín marca los desafíos de la industria musical en Estonia

El reconocido Sveta Bar, emblemático local de espectáculos y centro cultural en Tallin, pondrá fin a su trayectoria el 1 de enero de 2024. El cierre, atribuido a diversos desafíos que enfrenta el sector del directo, marca el final de una era para uno de los clubes y salas de conciertos más queridos de la ciudad.

Iniciando como una tienda vintage y bar en 2017 en el barrio de Telliskivi, Sveta Bar evolucionó a lo largo de los años para convertirse en un referente cultural, recibiendo el prestigioso premio «Venue Of The Year» en los premios de la industria musical estonia. Su contribución al programa de la Semana de la Música de Tallin y su inclusión en la red Liveurope consolidaron su estatus como un espacio vital para la escena musical local.

Este cierre marca un resentimiento del sector de la música en vivo que atraviesa Estonia. El cierre se atribuye principalmente a factores económicos, refleja la difícil situación que enfrenta el sector, afectado por la crisis de la COVID-19, crisis energética y económica, restricciones y leyes, entre otros desafíos.

Roman Demtsenko, socio de Sveta Bar, advirtió que el cierre no es un caso único y sugirió que otros clubes podrían seguir el mismo camino. En respuesta. ala situación, diferentes discotecas y salas locales han creado la Asociación de Ocio Nocturno de Estonia busca representar a las empresas del sector, abogando por la diferenciación fiscal y la supervivencia de la música en vivo y la cultura de club en Estonia.

Elena Natale, fundadora del afamado club HALL de Tallin, declaró: «Durante años hemos trabajado sobre todo de forma independiente, pero tal y como está la situación y con una nueva subida de impuestos en camino, la única respuesta adecuada es colectivizarnos de verdad y unirnos, luchar por nosotros mismos para que la música en directo y la cultura de club puedan existir y prosperar en Estonia».

En palabras de Natale, su objetivo es hacerse oír y lograr una diferenciación fiscal para los locales de música en directo y lo clubes nocturnos, ya que la próxima subida del IVA que se espera, lo eleva al 22%, siendo una de las más altas de Europa en lo que se refiere a actividades culturales.

En conclusión, el cierre de esta mítica sala situada en Tallín, no es un mero cierre sino que traslada las necesidades por mejorar la situación del sector en el país. Además, según Vip, el impacto de Sveta Bar va más allá de la música, sirviendo como punto de encuentro para la comunidad ruso-estonia y manteniendo fuertes lazos con la comunidad LGBTQ+. Desde conciertos hasta colaboraciones con grupos juveniles, mercadillos de segunda mano y eventos culturales diversos, Sveta Bar deja una huella en la vida musical y cultural de Tallin.

Datos extraídos de Vip-booking.com