El Columpio Asesino vuelve por la puerta grande con Ataque celeste, su primer disco en seis años, bien recibido por crítica y por público, con un sonido más electrónico y luminoso. En una charla con Apmusicales, su compositor y vocalista Albaro Arizaleta habla del álbum y de las consecuencias del coronavirus en sus planes de futuro.
PREGUNTA: Han pasado seis años desde Ballenas muertas en San Sebastián, ¿por qué tanto tiempo?
EL COLUMPIO ASESINO: Hasta se dijo que nos habíamos despedido a la francesa. Sucedió que llevábamos muchos años encadenando giras y grabaciones de disco. Las giras son muy intensas y nuestra manera de componer nos lleva un año mínimo con cada álbum, más los dos de gira que le siguen. Eso es mucho tiempo y acabamos muy quemados, por eso decidimos darnos un año de espacio antes de volver a grabar.
PREGUNTA: ¿Ha sido vuestra grabación más trabajosa?
EL COLUMPIO ASESINO: A nosotros todo nos cuesta. Tenemos una manera de trabajar que hace que no nos guste repetir fórmulas, por eso la dificultad de encontrar algo con lo que estemos cómodos. Con Ballenas pensamos que se había acabado un sonido y con este nuevo trabajo queríamos reinventarnos también, pero manteniendo la impronta, con algo más luminoso como Huir.
PREGUNTA: ¿Por qué el cambio de sello discográfico?
EL COLUMPIO ASESINO: A Mushroom Pillow les debemos mucho todo el trabajo hecho con nosotros, pero pensamos que también se había acabado una etapa. En Oso Polita está el que fue nuestro primer mánager. Además, la cercanía es algo que valoramos y la sede está en Bilbao.
«Hemos cambiado de sello, entre otras cosas, porque la cercanía geográfica es algo que valoramos»
PREGUNTA: ¿Se mantiene la formación?
EL COLUMPIO ASESINO: Por motivos familiares ha salido Íñigo, que se ocupaba de teclados y trompeta, y ha entrado en su lugar Jaime Nieto, que tocaba en We Are Standard, entre otros grupos.
PREGUNTA: Frente a Ballenas muertas en San Sebastián, ¿habéis buscado un disco con más aire?
EL COLUMPIO ASESINO: Aquel retrataba dos tipos de crisis, la personal y la social. Este disco se ha centrado más en lo personal. Habla de ese conflicto que tenemos las personas ante el divorcio imposible con uno mismo, con las dos voces opuestas que forman parte de nosotros.
PREGUNTA: Curiosamente, frente a aquel disco más introspectivo que se grabó en un monte, este disco más luminoso ha nacido en el local de ensayo, ¿no es así?
EL COLUMPIO ASESINO: Sí, entonces nos pasamos catro meses en una casa que no sé cómo no acabamos como en El Resplandor. El entorno era bucólico, pero la casa se caía a pedazos y eso se ntoó en el álbum. Este lo hemos hecho en nuestro local, en horario casi de oficina y picando piedra hasta que dimos con lo que queríamos.
PREGUNTA: Ataque celeste se mantiene fiel a vuestro gusto por los discos breves…
EL COLUMPIO ASESINO: De hecho, ha sido el más breve. Con la saturación de grupos que hay, a mí los discos cortos me gustan, aunque no fue premeditado, sino porque no encajaban los otros temas que teníamos.
PREGUNTA: ¿A qué se refiere el título, Ataque celeste?
EL COLUMPIO ASESINO: Es un síndrome que acuñamos para explicar la angustia de algunas personas por disfrutar esos días azules interminables en los que parece una máxima pasarlo bien, como imperativo. Es esa presión por estar siempre feliz, aprovechando y sobre todo explotando el tiempo, lo cual nos deja cada vez menos tiempo para la contemplación.
«Hay una presión por estar siempre feliz y explotar el tiempo»
PREGUNTA: Huir tiene visos de convertirse en uno de vuestros temas más conocidos, gracias a una letra muy personal…
EL COLUMPIO ASESINO: Es una historia en la que se pueden ver reflejadas muchas personas, la de ir mendigando amor en horas bajas. En efecto, es muy personal, pero no sabes la de gente que se ha sentido identificado con el personaje de la canción.
PREGUNTA: A pesar de que sois dos cantantes en el grupo, este disco da más protagonismo a Cristina Martínez. ¿Ha sido buscado?
EL COLUMPIO ASESINO: Le pegaban mucho mejor las melodías, porque las llenas más, y yo me siento cómodo en un segundo plano. No tengo vocación de cantante, lo hago por accidente, de la época en la que formé la banda con mi hermano.
PREGUNTA: ¿Os ha roto muchos planes el coronavirus?
EL COLUMPIO ASESINO: De momento no, hemos tenido suerte porque nuestra gira empieza en dos meses. Tenemos México ahí el 17 de abril y estamos a la espera, pero de momento no se ha caído nada. También es cierto que nos hemos pegado tres años en el limbo trabajando en ese disco, sin cobrar, como para que justo ahora se caiga todo.
«El modelo francés está muy bien, porque mientras están en estudio, a los músicos les protegen de forma parecida a los agricultores cuando están fuera de temporada»
PREGUNTA: ¿Crees que, como en países como Francia, la música debería estar protegida públicamente?
EL COLUMPIO ASESINO: Más que los espectáculos, los que deberíamos estar más cubiertos somos los músicos. El modelo francés está muy bien, porque mientras están en estudio, les pasa algo parecido que a los agricultores cuando están fuera de temporada. Estar dentro de la campaña de festivales es la pera, pero el resto del año estamos más desprotegidos.
PREGUNTA: Por vuestra propuesta que combina electrónica y rock alternativo, ¿disfrutáis de un abanico más amplio de espacios a los que ir a tocar?
EL COLUMPIO ASESINO: De momento estamos más en el modelo tradicional de festival «indie», aunque ese modelo está cambiando y los festivales cada vez son más eclécticos y entra de todo.
El calendario de El Columpio Asesino recoge conciertos en ciudades como Bilbao (sala Jimmy Jazz, 16 de mayo) y Madrid (Festival Tomavistas, 21 de mayo).