«El Gobierno Estatal es sordo y excluyente, actúa con absoluta prepotencia. Hoy anuncia una rebaja, mañana la niega, Lo es tanto, que quizá sí acaben bajándolo al inicio de la próxima campaña electoral. El precio del IVA es, pues, la expresión metafórica de la peor política. La de creer que la gente puede ser engañada con nocturnidad». Así de contundente es el Conseller de Cultura de la Generalitat de Catalunya, Ferran Mascarell, en un artículo en el Diari Ara. El titular de cultura catalán ha criticado desde el primer momento la subida del tributo en 2012, y en este sentido escribió en el Anuario de la Música de APM en 2014.
Mascarell ve en el Ejecutivo de Mariano Rajoy una clara «voluntad de impedir una sociedad más culta, reflexiva y formada» y le acusa de «estigmatizar» al sector cultural con un «impuesto desorbitado». Además, avisa de que se trata de un «círculo perverso», ya que apunta que el IVA al 21% ha hecho caer el consumo cultural en más del 27% en el conjunto del Estado, lo que se traduce en una menor recaudación para las arcas del Estado. Por no hablar de los puestos de trabajo perdidos y los proyectos frustrados.
Así pues, tacha el ivazo de «barbaridad política».»Quieren poner una losa encima del mundo cultural y las administraciones públicas que creen en él. Quieren dejar claro que quienes mandan son ellos: se han equivocado pero prefieren mandar que gobernar, imponer que escuchar».
«Catalunya es un país construido desde la cultura. Todo lo que implique cuestionarla y dificultarla, cuestiona y dificulta nuestro fundamento como sociedad. Nos empobrece en conocimientos y valores. El Estado lo sabe, todo esto. Conoce perfectamente las nefastas consecuencias que ha tenido el IVA al 21%: un verdadero descalabro. Sabe, o tendría que saber, el nombre incontable de proyectos frustrados. Lo saben, pero no lo quieren corregir. Les place mantenerse en una perseverante revancha política contra la cultura».