Según un nuevo informe de Live Performance Australia, la industria sufrió una pérdida del 70% de ingresos y de asistencia después de que el sector cerrase sus puertas en marzo de 2020.
La pandemia tuvo un impacto demoledor en la industria de la música en vivo en Australia. Evelyn Richardson, directora ejecutiva de Live Performance Australia, declara en IQ.Mag: «El informe de LPA muestra el efecto devastador del covid-19 en el sector de los eventos en vivo. Las restricciones y los cierres de fronteras provocaron una interrupción significativa en una industria que depende en gran medida de las giras nacionales».
El informe expone que la categoría de Música Contemporánea, la cual incluye el rock, el pop y el hip-hop, y que representa el 50% de los ingresos totales de la industria del entretenimiento, experimentó una disminución del 63% en ingresos y del 65% en asistencia entre 2019 y 2020.
Además, los festivales de música contemporánea atrajeron a 437.500 personas en 2020, generando más de 54,2 millones de dólares australianos por la venta de entradas. Sin embargo, en comparación con 2019, sufrió una pérdida del 70% tanto en asistencia como en ingresos. Los principales festivales de esta categoría fueron Falls Downtown, WOMADelaide y St. Jerome’s Laneway Festival.
Según Richardson, el sector del entretenimiento australiano aún le queda un largo camino: «El pronóstico para los próximos 12 meses indica que la viabilidad de la industria está seriamente amenazada». Asimismo, reitera que el gobierno debería ofrecer un paquete de Reactivación Empresarial para garantizar la recuperación del sector cuando se relajen las restricciones vigentes.
