Esta semana, EY España, en colaboración con la Fundación Paco de Lucía, ha presentado en el Círculo de Bellas Artes de Madrid el informe El flamenco en España. Presente y futuro de un arte que está más vivo que nunca. El estudio traza una radiografía actualizada del flamenco en el contexto español, elaborada a partir de una encuesta a nivel nacional y entrevistas en profundidad a expertos del sector.
Más allá de su dimensión artística y de su condición de patrimonio cultural inmaterial, el informe posiciona al flamenco como un activo estratégico de primer orden, con un potencial significativo para generar identidad, cohesión social, empleo y riqueza, así como para proyectar la cultura española a nivel global.
Con este informe, EY España busca desmontar los estereotipos que siguen pesando sobre el flamenco: que es un arte exclusivamente andaluz, que pertenece a las minorías, que ha dejado de conectar con las personas jóvenes o que solo interesa a turistas extranjeros. Frente a estas percepciones limitantes, el estudio defiende que el flamenco es un fenómeno “transversal, intergeneracional y cada día ganas más aficionados. Y no es solo cultura; proyecta su valor e influencia en industrias como la moda, la docencia, el turismo o las artes escénicas”.
Un arte con arraigo popular y proyección internacional
Entre los principales hallazgos del informe, se destaca que el flamenco cuenta con un enorme reconocimiento social y una proyección internacional creciente. No obstante, el estudio también advierte que el sector enfrenta retos estructurales, especialmente en aspectos como la financiación, la profesionalización y la sostenibilidad. Además, el informe subraya el papel del flamenco como motor del turismo cultural, vertebrador territorial y espacio de encuentro intergeneracional.
Uno de los datos más significativos del estudio es que más de 27,4 millones de personas en España escuchan flamenco, pero solo 2 de cada 10 creen que las instituciones lo apoyan como merece. Además la propuesta del informe apunta también hacia una mayor implicación del sector privado para impulsar este fenómeno cultural y que pueda generar más valor.
Una herramienta de proyección cultural global
En un contexto global donde la cultura funciona como herramienta de proyección internacional, el flamenco, según el informe, representa una ventaja competitiva. Su reconocimiento por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad no solo avala su valor simbólico, sino que refuerza la responsabilidad colectiva de «preservarlo, potenciarlo y universalizarlo«.
Este informe constituye un primer paso hacia una agenda compartida que reconozca el valor real del flamenco en la España contemporánea y abra nuevas vías para su promoción, desarrollo y sostenibilidad. Una apuesta no solo por honrar su legado, sino por garantizar su continuidad como un arte vivo, vibrante y relevante en el presente y el futuro.
Fuente EY España