En los últimos días, los medios de comunicación se hicieron eco de la posibilidad de que una canción generada por inteligencia artificial (IA) pudiera llegar a ser nominada para los prestigiosos premios Grammy. La enigmática figura detrás de «Heart on My Sleeve» se hace llamar Ghostwriter y es el genio detrás de la canción que asombró al mundo el pasado abril al imitar las voces de Drake y The Weeknd con IA.
La canción, que ahora pretende presentarse a las categorías de Mejor Canción de Rap y Canción del Año, fue retirada de las plataformas de streaming en abril después de acumular más de 600,000 reproducciones en Spotify y 275,000 en YouTube. Plataformas como YouTube, Spotify, Apple Music, TIDAL y Deezer tomaron la decisión de eliminar la canción de sus servicios como un acto de responsabilidad, con el fin de evitar cualquier uso que pudiera perjudicar a los artistas.
Este caso ha abierto un debate sobre la música generada por IA en la industria musical. La Academia de Grabación actualmente tiene requisitos específicos para que una canción generada por IA pueda optar a un Grammy. Uno de estos requisitos es que la pista debe estar escrita por un humano, y por esa parte, tal y como dijo el CEO de la Academia de Grabación, Harvey Manson Jr., «En cuanto al lado creativo, es absolutamente elegible porque fue escrita por un humano».
Sin embargo, el hecho de que la canción haya sido compuesta por un humano no es el único requisito para optar a algún reconocimiento en los Grammy. También debe cumplir una serie de condiciones, entre las cuales se encuentra la «distribución general» que debe tener la pista a nivel comercial. En otras palabras, si un artista no cuenta con los permisos para llevar a cabo un «lanzamiento amplio» de su composición, esta no podrá optar al Grammy.
El período de silencio de Ghostwriter entre su anterior éxito y su última creación, «Whiplash», en la que las voces de Travis Scott y 21 Savage son generadas por IA., no fue en vano. Según The New York Times, quienes están detrás del proyecto se han reunido con sellos discográficos, líderes tecnológicos, plataformas musicales y artistas para discutir cómo aprovechar mejor el potencial de la IA en la música. Incluso participaron en una mesa redonda virtual organizada este verano por la Recording Academy, la organización detrás de los premios Grammy.
Sin embargo, Manson recientemente desmintió las esperanzas creadas, anunciando a través de un video en su cuenta de Instagram que «Heart on My Sleeve», creada por Ghostwriter con la ayuda de la IA, no recibirá ningún Grammy. Según la Academia de Grabación, las voces utilizadas en la canción fueron adquiridas ilegalmente y no cuentan con la autorización de los sellos discográficos ni de los artistas. Además, la canción no se encuentra disponible comercialmente. Así, el emocionante viaje de la IA hacia los Grammy llega a su fin, al menos por este año.