Mujeres en la Industria Musical
Mujeres en la Industria Musical

MIM, la unión contra el machismo en el sector musical

Preguntar quién es el mánager y buscar siempre a un hombre con la mirada. Ver a una mujer y dar por hecho que es la novia del músico, la que lleva el merchandising o la que vende entradas. Hablar con los amigos de grupos que gustan a las chicas y presumir de que molan más los que arrastran solo a tíos. Presuponer conocimientos musicales en los compañeros y dudar siempre del criterio de ellas. Se llama machismo.

Para combatirlo se ha creado la Asociación de Mujeres en la Industria Musical (MIM), que se constituyó formalmente en el último Mercat de Música Viva de Vic. «Muchas llevábamos tiempo con la idea rondándonos por la cabeza, pero no ha sido hasta llevarlo a la práctica que nos hemos dado cuenta de lo necesario que era», dice Nuria Rico, la directora de Ticketing en Madrid de la promotora Live Nation.

«Mujeres que llevamos 20 años en la industria musical hemos visto cómo mujeres preparadas, algunas mucho más que nuestros compañeros, siguen sin tener presencia en los comités de dirección, y en muchos casos ni siquiera se ha percibido como machismo», explica Rico.

Para tratar cuestiones como estas, MIM ha organizado este miércoles en el marco del festival Villamanuela una actividad titulada ‘Mujer e industria musical: ¿a qué problemática nos enfrentamos?’. Es un hecho que hay más críticos musicales hombres que mujeres, mientras que ellas ocupan puestos en promoción y comunicación. ¿Por qué esta diferencia? Desde MIM se intentan dar respuestas y, sobre todo, visibilizar y denunciar la desigualdad.

MIM en Vic
MIM en Vic

«Cuando empezamos a hablar de esto, surgió la idea de reunirnos para ver el calado que tenía y si había interés de hacer algo por parte de alguien más, y en marzo convocamos una primera reunión en las oficinas de Live Nation Madrid, en la plaza de Callao. La sorpresa fue que la convocatoria fue masiva. Entonces nos dimos cuenta de cómo detectábamos el machismo y de la necesidad que teníamos de unirnos. Creamos una página de Facebook y en nada tenía más de 800 seguidoras», relata Rico.

En Vic, MIM puso en común los estatutos y eligió una junta directiva formada por Carmen Zapata, como presidenta; Marcela San Martín de la sala El Sol; y Rico como secretaria. Por ahora, ya se han creado varias comisiones y se han iniciado los trámites burocráticos para ser reconocidas.

Actos como el del Villamanueva, en Madrid, se repetirán en forma de mesa informativa en festivales como el Monkey Week, en Sevilla, y la próxima reunión se celebrará el día 26 de octubre en el marco del BIME, en Bilbao. Rico invita a participar también a los hombres: «Queremos crear conciencia de género, pero nuestra asociación está abierta tanto a mujeres como a hombres».

Con la «misión» de «intentar cambiar las cosas para que todo vaya a mejor y construir un futuro más justo en el que las mujeres puedan acceder donde quieran», MIM se propone crear comisiones que estudien aspectos más concretos porque «hacen falta datos»; crear una bolsa de empleo que sea una referencia para el sector; y establecer relaciones con asociaciones y colectivos de todo el Estado para «trabajar en común».

«Muchas nos sentimos en la obligación como mujeres y profesionales de abrir paso a las que llegan, de intentar evitar que se encuentren con los problemas que nosotras hemos tenido. Por eso hay que provocar que organismos institucionales se interesen en dar visibilidad al problema», sentencia.

Mientras, por todo el país, existen colectivos que trabajan en direcciones similares, como Fusa Activa, en Valencia. Hablaba con ellas recientemente la periodista Raquel Andrés en LaVanguardia.com y explicaban que sus labores son de difusión de “proyectos feministas o antipatriarcales” relacionados con la música, además de ofrecer una completa base de datos “de edición colectiva” con información de grupos mixtos y formados al 100% por mujeres.