Autor: Javier Bejarano

Pablo Und Destruktion: «Quería hacer mi último disco de rock-rock»

Pablo G. Díaz, el bigote más célebre del ‘indie’ como alma del proyecto musical Pablo Und Destruktion, vuelve con un nuevo disco, Predación (Sonido Muchacho), que presentará mañana en olor de multitudes en Madrid y en el que se propuso convertir el rock en un estilo nuevamente vigente, fuente de conflicto en una sociedad lúdica que ha olvidado la noción de esfuerzo y compromiso.

PREGUNTA: Predación iba a suponer un nuevo inicio tras la trilogía previa conformada por Animal con Parachoques (2012), Sangrín (2014) y Vigorexia emocional (2015). ¿Qué pasó?
RESPUESTA: Pues que quedaba el epílogo. Esos discos no tienen una dramaturgia propia, pero sí sentido como conjunto. Este sí lo tiene por sí mismo, recoge elementos que se trataban en los otros y ofrece una solución.

P: En él denuncias los vicios de la actual sociedad, pero también que El enemigo está dentro.
R: El enemigo está dentro de mí, en la sociedad occidental y en la propia existencia, pero me parece más interesante buscarlo dentro que fuera.

P: También propones que «seamos hermanos y herejes», ¿de qué?
R: Del discurso hegemónico y absolutamente totalitario que tenemos ahora, porque las verdades absolutas no existen, ni siquiera en la ciencia más dura, como para que me lo digan en el comunismo. Universales para mí son fuerzas oscuras más ancestrales.

P: Lo has grabado junto a Paco Loco, ¿por qué razón?
R: Para probar. Quería hacer mi último disco de saga y de rock-rock. Grabamos todo en directo y casi no hay dirección de arreglos. Ya al final registramos la guitarra sintetizada y la voz, de la que se hicieron dos versiones, porque no quedó muy contento.

P: De hecho, retirasteis todas las copias que se habían producido ya para enmendar las letras. ¿Y eso?
R: Soy mi crítico más fiero, porque sé que cuando hago un disco, transformo mi percepción de la realidad. Es como hacer un mapa de un universo nuevo, uno que puede ser muy bonito, pero que al girarlo, te das cuenta de que es una mierda. Hasta que no acabé no lo vi, pero es que nunca había tenido unas exigencias industriales, unos plazos que cumplir.

P: ¿Y ha supuesto mucho gasto extraordinario?
R: Mucho, un coste que asumo no cobrando por el concierto de Joy Eslava ni el de Murcia. Además, los primeros discos que se vendan servirá para cubrir costes.

«En toda España, incluido en Asturias, tengo público, pero en Madrid tengo militantes»

P: Probaste estas canciones en directo en conciertos en Europa «donde nadie te conocía». ¿Es un método que utilizas habitualmente?
R: Sí, los conciertos son un buen termómetro para probar los temas nuevos, sobre todo con gente que no habla mi idioma. Entonces dependes de esas fuerzas ancestrales y por eso cada vez me interesan más.

P: Ya en España, presentarás el disco este sábado, solo un día después de publicarlo. ¿No es muy atrevido?
R: Creo que la gente va a ir igual, porque con el público, especialmente con el madrileño, se ha creado una complicidad perturbadora y muy bonita. En toda España, incluido en Asturias, tengo público, pero en Madrid tengo militantes.

P: ¿Qué papel juega para él el disco respecto al directo, menos que un reclamo?
R: El directo es lo más importante para mí y el disco, un satélite. En el camino de crear un universo subjetivo me he juntado con una gente delirante y maravillosa, que es la banda que me acompaña.

«Las presentaciones tienen algo de acto de liberación de la energía surgida durante la creación del disco»

P: ¿Cómo es esa banda?
R: En Joy Eslava voy a tocar con el grupo nuevo de mi exmujer, que se llama Captains, y también con Alberto Acinas. Son las dos personas con las que más he tocado en mi vida, cientos de conciertos en cuchitriles, en cuevas del Sacromonte granadino, en casas okupas berlinesas y en sótanos. Entre todos ellos, no creo que hayan ido a vernos más de 150 persona en total y ahora tenemos la oportunidad de dar uno al que van a ir por lo menos tantos como al conjunto de todos los demás.

P: ¿Qué expectativas tienes?
R: Creo que va a salir todo muy bien, estoy muy satisfecho con todo.

P: Será difícil olvidar en cualquier caso el que ofreciste en el Teatro Lara de Madrid…
R: Aquel concierto fue probablemente el día más importante de mi vida. Todavía me sigue viniendo gente a hablarme de aquel día. Para mí las presentaciones tienen algo de acto de liberación de toda la energía surgida durante la creación del disco.

P: ¿Dices que este será tu último disco de rock?
R: Yo voy a seguir siendo roquero, pero estas fuerzas cambian de nombre. La idea que se tiene del rock más lúdico, efusivo o individualista lo pilla ahora el rap o el trap; el rock de fondo, el de 6.000 años de antigüedad, es un rock de antinomia, de conflicto. Me interesa aprender otros géneros, pasar a una etapa más abstracta. De todos modos, aunque tenga la voluntad de apartarlo, creo que no voy a poder.

Pablo Und Destruktion tiene previsto actuar mañana en la sala Joy Eslava de Madrid para presentar Predación.