Primavera Sound refuerza su compromiso con la seguridad y diversidad a través del protocolo «Nobody is Normal»

Con todas las entradas agotadas cinco meses antes de su celebración, Primavera Sound Barcelona 2025 no solo volverá a destacar por su propuesta artística, sino también por su firme compromiso con la creación de un entorno seguro, libre de violencias y discriminaciones. En su 23ª edición, el festival reafirma su voluntad de ser un espacio plural y seguro gracias al protocolo «Nobody is Normal», una iniciativa que cumple ya seis años desde su implantación.

Una red activa de protección y acompañamiento

Durante la celebración del festival en el recinto del Parc del Fòrum, el protocolo volverá a desplegar una red de apoyo compuesta por dos estands informativos, personal itinerante especializado y un equipo formado para atender, detectar y canalizar cualquier situación de violencia o discriminación relacionada con el género y la sexualidad.

Cualquier persona podrá acudir a estos puntos tanto para reportar casos de acoso o agresión como para informarse sobre los recursos disponibles. Además, el personal en movilidad ejercerá una función preventiva, visibilizando la presencia de la red de apoyo y facilitando la detección temprana de posibles situaciones de riesgo.

Una comunidad comprometida

Lo que nació en 2019 como un plan de acción pionero —coincidiendo con la histórica edición del primer cartel paritario de Primavera Sound— se ha consolidado como una estructura esencial para garantizar que el festival sea un entorno seguro, libre, integrador y transgresor.

«Nobody is Normal» no solo actúa contra el machismo, la homofobia, la transfobia o la lesbofobia, sino que celebra y protege las identidades, cuerpos y formas de expresión no normativas. Es un manifiesto colectivo contra los discursos de odio que, lamentablemente, han ido ganando espacio en otros ámbitos sociales.

La comunidad del festival —artistas, público, equipo técnico y organizadores— ha sido parte activa en hacer suyo el espíritu de esta iniciativa, demostrando que es posible disfrutar de la música y la celebración desde el respeto, la empatía y la diversidad.

Un modelo de referencia para la industria

En un momento de reflexión sobre los valores que deben marcar el presente y el futuro de la música en vivo, Primavera Sound demuestra que es posible combinar impacto cultural, éxito comercial y responsabilidad social. El protocolo Nobody is Normal no es solo un mecanismo de respuesta: es también una herramienta educativa y de transformación, cuyo espíritu se proyecta más allá del propio recinto.

Esta 23ª edición del festival vuelve a recordarnos que la experiencia musical debe vivirse en comunidad, con seguridad, libertad y respeto. Porque en Primavera Sound, nadie es normal… y esa es precisamente la mejor noticia.