Con el Estado de Alarma todavía vigente, la desescalada ofrece unas circunstancias muy limitadas para la música en vivo. No obstante, la semana pasada aparecieron las primeras ofertas culturales a pequeña escala, que han decidido conectar de nuevo al público con el artista. Hace unos días Rulo ofreció un concierto en Cantabria, la Sala Jamboree de Barcelona reabrió e Indigo Drone y Los Punsetes actuaron en Madrid.
Rulo y la Contrabanda sacaron nuevo disco en noviembre y lo habían presentado en ocho ocasiones. Pero la crisis sanitaria corto en seco su gira. Sin embargo, el gobierno cántabro ha impulsado una campaña de reactivación cultural, ‘La Cultura Contraataca’, con distintos conciertos con músicos locales, uno de los cuáles lo protagonizó el exmiembro de La Fuga. La actuación tuvo lugar el pasado 29 de mayo en la terraza del Palacio de Festivales de Cantabria, frente a la bahía de Santander.
El concierto atípico contó con 100 personas de público, repartidas en sillas separadas por más de dos metros de distancia. Además, el público tuvo que limpiarse las manos con gel hidroalcohólico y para sentarse o bien ir al baño tenían que ir acompañados de personal de la organización.
El músico también adaptó su formación, a trío, para mantener la distancia de seguridad, lo que bautizó como “contrabandita”. “Gracias por estar aquí para celebrar la vida y la música. Vamos a pasar mucho tiempo sin subirnos a un escenario, pero con esta alegría de hoy tenemos para rato”, explicó desde el escenario.
Madrid y Barcelona también ofrecen pequeños conciertos
Mascarillas obligatorias, entradas y salidas escalonadas, sin intermedios ni servicio de bar, y con un aforo de 30 personas. Estas fueron las condiciones de apertura de la Sala Jamboree de Barcelona, que el 28 de mayo ofreció su fórmula habitual de dos pases a las 20 y a las 22 horas con la Clarence Bekker Band.
Los días 29 y 30 de mayo la Sala Moby Dick de Madrid volvía a abrir sus puertas a treinta personas. El viernes actuaron Indigo Drone y el sábado fue el turno de Los Punsetes. Con felpudos desinfectantes para los zapatos, gel hidroalcohólico para las manos, y por supuesto, mascarillas. Asimismo, la actuación se retransmitió en streaming pagando también entrada.