The Wannabes son aquellxs artistas do it yourself (DIY) de la generación Z que empiezan gestionando su carrera sin apenas recursos ni ayuda, pero con actitud de estrella, de ser aquello en lo que se quieren convertir. Y llega un momento en que lo logran. El wannabe se convierte en be y acaba pisando los escenarios de los principales festivales y recintos del mundo.
Abocarse (como pronominal): Entregarse con vigor y entusiasmo a la realización de un proyecto o una tarea.
Me despido de este apartado, al menos del nombre de Wannabes, con Paula Ribó aka Rigoberta Bandini (30). Es mi quema spoti de los últimos meses.
Presumo que todas las que estamos por aquí somos personas apasionadas y con cintura. Me imagino que muchas sentimos la necesidad de mezclar trabajo y sentimientos. Acostumbramos a abocarnos a situaciones donde se mezcla bondad y obsesión.
Ahora que, como tantos, ando un poco desnortado profesionalmente, siento que necesito acercarme a proyectos como el de esta barcelonesa, dobladora de pelis de animación (entre otras ocupaciones artísticas). En verdad, lo que necesito es estar en un bolo suyo con personas queridas y tomarme dos birras. Más pronto que tarde tendré suerte porque se va a hinchar a dar todos los bolos que quiera. Mientras, me dejo llevar por el ímpetu y flow que despiertan sus canciones.
Sin saber muy bien porqué percibo en Rigoberta Bandini la relevancia que Amaral generó en el 2002 con su “indie” Estrella de Mar. Una tía que mola haciendo música que escuchan lxs “enteradillxs» pero que a todxs va a enamorar.
Con pocas horas de escenario, ya son capaces de armar este show en streaming para el Museo Thysenn.
